Las tasaciones digitales han crecido durante el año 2021, alcanzando hasta las 1.400 operaciones en sus bases de datos.
El sector inmobiliario avanza en su digitalización a pasos totalmente agigantados. Prueba de ellos es que las tasaciones inmobiliarias han conseguido aumentar un 27% durante el año 2021. El resultado se debe a TAS///API, la utilidad en línea del Colegio Oficial y Asociación de Agencias y Agentes Inmobiliarios de Madrid. Además, esta herramienta permite realizar informes periciales de bienes inmuebles de forma telemática e íntegra.
Después de su implantación, la aplicación online tiene incorporadas a su base de datos 1.400 tasaciones de bienes inmuebles (viviendas, trasteros, fincas rústicas, solares, oficinas, naves, locales, aparcamientos y edificios). Esto simboliza un incremento del 27% respecto a 2020.
La aplicación cuenta actualmente con un valor acumulado de más de 235 millones de euros. Esta cantidad monetaria llega a obtenerse a través del valor total de los bienes inmuebles tasados por los profesionales a través de TAS///API.
¿Qué ventajas ofrecen las tasaciones digitales?
La aplicación, que incluye 46.000 testigos en su base de datos (2021), cuenta con muchas utilidades. Entre ellas, las que más destacan son su gran facilidad de manejo que incluye fotografías y mapas geolocalizados y una amplia base de datos de testigos de los propios colegiados en sus tasaciones o la inclusión de datos catastrales.
Según explican desde el Colegio Oficial y Asociación de Agencias y Agentes Inmobiliarios de Madrid, la riqueza de los testigos que facilitan las tasaciones digitales (que son diversos inmuebles de comparación que permiten conocer de forma adecuada el mercado), proporciona seguridad y confort al tasador a la hora de valorar correctamente la edificación.
Por último, los agentes de la propiedad inmobiliaria realizan, entre sus funciones principales, una íntima colaboración con la Administración de Justicia. Esto es debido a que, al desplegar sus conocimientos especializados, pueden actuar como peritos oficiales en distintos tribunales.
Fuente: elEconomista